En algunas ocasiones en este blog he hablado del derecho de todos los niños a tener la vida que ellos decidan elegir y no la de sus padres o tutores.
Los niños jamás deben ser un medio de los padres para realizar los sueños o deseos que ellos no pudieron alcanzar. Y aunque en la mayoría de ocasiones los padres actúan de forma inconsciente, eso no les quita la responsabilidad que tienen. Estoy completamente segura de que si supieran las consecuencias que provocan en sus hijos no lo harían.
Un ejemplo claro de cómo los padres eligen la vida, y por ende la felicidad futura de sus niños, lo vemos claramente en un documental llamado "Niños trofeo", emitido por la 2 de tve. Este documental trata de niños que ya desde su primera infancia son entrenados e instruidos para ser deportistas de élite y todas las consecuencias que esto conlleva para ellos. Pero no tenemos que irnos a casos extremos como estos, pues en nuestra sociedad encontramos casos que quizás nos resulten más familiares, como por ejemplo padres que quieren que sus hijos sigan con el negocio familiar, que desean que sus hijos estudien determinada carrera u oficio, que les apuntan a determinado deporte, actividad musical, etc. y que incluso están convencidos de que es el niño quien ha elegido realizar esa actividad. Pero no nos engañemos, como he comentado, los padres en estas ocasiones actúan de forma inconsciente, y a no ser que reflexionen y analicen de forma introspectiva, siempre dirán que la elección ha partido del niño y no del adulto.
No podemos olvidar, que los adultos con su comportamiento moldean la conducta del niño, y éste puede llegar a convertirse en una completa marioneta de sus padres, aún sin saberlo ellos. Pero también es cierto que existen muchos niños que realmente sienten que ya desde muy temprana edad quieren dedicarse a algo concreto y esto no deberse a la influencia directa de los padres.
Es difícil como padres no realizar esta proyección de deseos en los niños y no condicionarle en sus decisiones futuras. Para conseguir darles la libertad que tienen como derecho, lo primero que tenemos que saber es que como educadores tenemos ese gran poder de influencia, que debemos intentar no elegir por ellos, sobre todo en temas importantes como sus intereses, y lo más importante que tenemos que hacer es darles la plena confianza de que elijan lo que elijan siempre tendrán nuestro apoyo.